La defensa del juez del escándalo
Claudio Aranda, árbitro del polémico Barnechea-San Luis, negó la agresión contra Boris Sangredo.
El 0-0 entre Barnechea y San Luis hubiera pasado desapercibido, excepto por una acción del árbitro del partido, Claudio Aranda. Y es que el juez se acercó a Boris Sagrego e hizo sonar el silbato al lado de su oreja.
Así, el jugador del elenco metropolitano cayó al piso y, de hecho, ya hay un sumario por el hecho. Eso sí, el colegiado niega que el hecho sea una agresión. "No hubo ninguna agresión, nada. Estoy totalmente tranquilo. Me llamó la atención cuando empieza a correr esta noticia. Me pareció extraño, porque cuando pasa algo polémico uno está siempre pendiente de las imágenes, de lo que se va a decir", dijo en entrevista con La Tercera.
"Él reclama, pero no le presto atención. Me acerco en buena a tratar de explicarle, pero Boris me manda ‘a la punta del cerro’. Me reclama, me apunta con el dedo, me amenaza. Le digo ‘por favor sal de acá, voy a pitar'. Yo trato de no conversar con los jugadores. Y toqué el pito. No lo toqué", agregó.