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Nacional

Matías Rodríguez sueña una última oportunidad de azul

El ex defensa de la U, además, bendijo a su reemplazante en el club.

Rodríguez se fue hace dos semanas, pero ya sueña con volver a la U.
Rodríguez se fue hace dos semanas, pero ya sueña con volver a la U.

Matías Rodríguez dejó la Universidad de Chile y partió a Defensa y Justicia. El defensor más goleador en la historia del club universitario no renovó su vínculo y se marchó tras el Campeonato Nacional 2020. Con 34 años, el zaguero sueña con disputar algunas temporadas más en el profesionalismo y, aunque sólo se fue hace un par de semanas, ya está pensando en volver al Centro Deportivo Azul.

Y es que el trasandino no esconde su máxima aspiración: retirarse con la camiseta de la U. "Estoy en el segundo año para ser técnico y haciendo el curso de gestión y dirección deportiva. Eso último es lo que me llena y lo que haré a futuro", contó, sobre sus planes para le etapa final de su carrera. "Voy a cumplir 35 y me veo jugando hasta los 37 o 38, retirándome en la U. Ese es mi sueño. Por eso mi nacionalización sigue en curso, para tener más posibilidades de volver", acotó.

"Nadie se acercó a decirme que no me querían, pero tampoco a decirme que sí", explicó igualmente sobre su salida de la institución, en diálogo con el diario El Mercurio. "Dudamel me agradeció la entrega, pero no me dijo que siguiera. Uno palpa esas cosas. Había rebajado mi sueldo varias veces y no estaba dispuesto a hacerlo de nuevo. Con Vargas y Goldberg no hablé", agregó. Y sentenció: "El objetivo del club fue bajar la edad, no primó tanto el rendimiento. Nos fuimos tres mayores de 34. Querían un plantel más joven".

En tanto, bendijo sin escatimar loas a su reemplazante, Yonathan Andía. "Es extraordinario", dijo Rodríguez. "Le deseo lo mejor. Le dará mucho a la U. Sólo le pido que cuide bien la 6, porque la usó Musrri, yo y ahora es de él. Tiene todo para ser el lateral de la U y de la Selección", vaticinó. "Si yo me hubiese quedado y llegaba Andía, iba a estar feliz, creciendo juntos. Los grandes tiramos los equipos para adelante, más allá del lugar que ocupemos. Eso los dirigentes no lo saben y por eso a veces da bronca el trato hacia uno", sentenció.

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