El estallido de Messi deja en tela de juicio al DT

El Barcelona dejó de pelearle La Liga al Real Madrid de la peor forma posible. Los culés, con Arturo Vidal desde el minuto 59, perdieron como locales frente al Osasuna. Y Lionel Messi dejó caer toda la frustración públicamente. "No queríamos terminar así, pero fue el resumen de nuestro año: somos un equipo débil, que superan por ganas e intensidad", lanzó la "Pulga".

Fue apenas una porción de la durísima crítica del rosarino de 33 años, quien incluso tiene dudas de superar al Nápoli en los octavos de final de vuelta de la Champions League. Y de inmediato eso provocó reacciones en la directiva: el presidente de la institución, Josep María Bartomeu, convocó al entrenador culé, Quique Setién, a una reunión extraordinaria para analizar algunas cuestiones.

Así las cosas, queda la duda de la continuidad del ex entrenador del Real Betis, quien casi al terminar la primera quincena de enero de este año llegó al club para reemplazar al defenestrado Ernesto Valverde. El contrato de Setién dura hasta junio de 2022, aunque no es nada seguro que lo cumpla. La llave contra los napolitanos, cómo no, será clave para determinar qué pasará con él.

De hecho, un histórico futbolista de los catalanes teme quedar fuera frente a los pupilos de Gennaro Gattuso, que ganaron la Coppa Italia. "Hay peligro real de caer ante el Nápoli. Como aficionado, estoy preocupado por ese partido. Y creo que todos los hinchas culés comparten ese sentimiento", afirmó el brasileño Rivaldo, autor de un icónico gol de chilena frente al Valencia, respecto al durísimo presente que afronta el club.